En el primer año de vida del Observatorio Ciudadano de la Sequía (2021-2022) hemos contado con la ayuda y la participación de la ciudadanía para conocer la percepción del cambio climático y del riesgo de sequía, el grado de confianza en las instituciones con resposanbilidad directa o indirecta en estas materias y las preferencias de la población por distintas medidas de gestión. Se trata de indicadores que, hasta el momento, solo habían podido estimarse a partir de barómetros ambientales, realizados a escala regional, que no permitían su actualización periódica ni su cálculo en territorios que no cuenten con fuentes similares.
El principal objetivo del Observatorio Ciudadano de la Sequía, como proyecto de Ciencia Ciudadana, es contar con los conocimientos, opiniones, percepciones y valores locales para alimentar un barómetro específico sobre sequía, agua y cambio climático, que resulta esencial en los estudios sobre riesgos hidrológicos y climáticos. Gracias a la participación de la ciudadanía hemos podido construir y actualizar algunos de los indicadores que nos han permitido calcular el grado de vulnerabilidad al riesgo de sequía en el sur peninsular, colaborar en la construcción de opiniones informadas y construir un espacio de diálogo con las administraciones sobre las medidas de gestión más adecuadas y aceptadas.
Los resultados de esta primera experiencia han quedado sintetizados en el siguiente informe. Además, durante la segunda anualidad del proyecto (2022-2023), se avanzará en el conocimiento de la percepción social y de la opinión pública del conjunto de la población española sobre estas materias, de forma que podamos nutrir un ejercicio deliberativo para buscar consensos en relación con las medidas a adoptar para realizar una transición hidrológica justa.